El Burmilla es una raza de gato de origen Inglés. Es de talla media de pelaje color plata. Es la consecuencia de un cruce entre la raza persa y asián.
Para muchas asociaciones, el Burmilla es un gato Asiático.
Origen del gato Burmilla
La creación de la raza Burmilla es accidental y ocurre en 1981. La Baronesa Miranda von Kirchberg se encargó del cruce entre un macho persa y una hembra Burmese y de esta unión nacieron 4 gatitos de color plata.
Después del éxito del cruce, la Baronesa realizó más cruces con el macho persa, otra vez con éxito en 1982. Aquí apareció el linaje de los Burmilla.
A partir de 1983, se empezó a trabajar para que la raza Burmilla fuera reconocida y en 1989 se consiguió por fin que la RAZA BURMILLA fuera oficial. Por lo tanto, sí es una raza Inglesa.
Físico del gato Burmilla
Es un gato con una buena musculatura, es robusto. Las patas traseras son ligeramente más largas que las patas delanteras. Son finas y altas. Sus pies tienen una forma ovalada, bien dibujados. Tiene el tórax fuerte, da sensación de pesadez pero sin perder su figura esbelta.
Su cabeza es de talla media y, si le observamos de frente, forma un triángulo pequeño.
Su pelaje es corto, fino, suave y brillante, de color plata o ceniza.
Carácter y Comportamiento del gato Burmilla
El gato Burmilla es el gato perfecto para una familia. Ha heredado el lado pillo de la raza Burmese y la tranquilidad de la raza Persa. Conviene a los pequeños, a los medianos y a los mayores.
Es muy cariñoso, le gusta que le mimen y le acaricien, le encanta tumbarse en las rodillas de su dueño durante un buen rato…
Es un gato paciente y tolerante con los demás animales. No se muestra reticente hacia los perros, por ejemplo, aunque no baja la guardia.
Es un cazador nato y le encanta marcharse de aventura… ¡Cuidado, roedores y pájaros!
La alegría de la huerta
El gato Burmilla es un verdadero gato – payaso. Es experto en acrobacias y es muy parlanchín, no es un animal con el que nos aburriremos, más bien todo lo contrario.