El Mastiff tiene el pelo corto de color albaricoque. Es característica la cabeza grande, con la frente plana y que se arruga cuando está pensativo. El hocico es negro y ancho pero más bien corto, y descansa sobre una mandíbula ancha. Tiene los ojos pequeños y bien separados y son de color avellana. Las orejas, pequeñas y negras, cuando está en reposo, se ven planas y caen sobre sus mejillas.
Carácter
Son perros de buen carácter, complacientes y muy cariñosos. Aunque suelen ser perezosos es importante que hagan ejercicio con frecuencia. No se convierte en la sombra de su dueño pero no le gusta estar solo: hablar de un Mastiff es hablar de un animal leal y devoto a su dueño.
Es buen perro guardián porque no se fía de las personas ajenas a su entorno habitual; además, solamente con su presencia intimida a cualquiera.
Aprende muy rápido, su educación se hace casi naturalmente. Con brutalidad no conseguiremos educar a nuestro Mastiff: el hecho de chillar o de alzar la voz le hace bloquearse y entonces es incapaz de responder a nada hasta que se desbloquee.
Es muy amigo de los niños pero no mide su fuerza y a veces sin querer puede ser un poco bruto.
A pesar de su dulzura, es un perro robusto y fuerte. Puede llegar a ser muy complicado llevarlo con una correa. Pero ya sabemos que es obediente: entonces, el paseo sin correa irá bien.
Es un perro fácil de llevar: a pesar de ser grande, «se hace pequeño». Si está acostumbrado a llamar a su perro y que éste llegue en 2 segundos … no espere lo mismo del Mastiff; es muy obediente pero va a su ritmo. Cuando se quiere tener un Mastiff hay que pensar en estas pequeñas cosas, para no acabar con un ataque de nervios.